Freeman, Liberación AHORA | El Presidente Barack Obama y el Gobierno de los Estados Unidos -ambos grandes paladines de la Paz y amantes de la Verdad-, afirman haber acabado con el malo-malísimo Osama Bin Laden, casi diez años después de la demolición controlada de las Torres Gemelas, y justo un mes después de que Obama presentara su candidatura para ser reelegido en las Elecciones Presidenciales de 2012.
Con las prisas y las circunstancias tan apabullantes de la ocasión, la administración estadounidense comunicó que los soldados de élite -presuntos ejecutores de Bin Laden- lanzaron el cadáver al mar. También, el Presidente Obama ha comunicado que no mostrará las imágenes del cuerpo del (sobre el papel) cabeza de Al-Quaeda, organización que tan buen papel desempeñó -y aún desempeña- en el gran tablero de ajedrez geoestratégico y geopolítico, al servicio de la élite global anglo-americano-sionista.
Por no mostrar, tampoco mostrarán imágenes del “sepelio marino” o lanzamiento al mar (quizá con la emoción y la urgencia se olvidaron de grabarlo). Pero en fin, no importa, señores. Obama dice que han matado a Osama, y además sale en la tele y en la prensa, y los contertulios también lo respaldan. Así que no hay más que hablar: a Bin Laden lo han liquidado el otro día y ahora sus restos reposan en el fondo del mar.
Y voy yo y me lo creo…